Adriana Gil y Sandra Cortez. |
Sandra Cortez
El Movimiento Sin Miedo (MSM) ha sido desde sus inicios un movimiento de jóvenes comprometidos que ha revitalizado el escenario político. Cabreados con la política tradicional, desde 1999 impulsamos una campaña fresca para cambiar y la
var la imagen de la ciudad de La Paz, con la firme convicción de que no puede existir Transformación Sin Renovación.
El MSM se sitúa hoy como la única alternativa desde la izquierda, un Movimiento que encuentra en la democracia la expresión ciudadana más importante y la que permite a todos expresarnos libremente, pero que exige la participación comprometida de cada uno de nosotros de manera más activa y decidida.
Hoy los jóvenes vemos con preocupación que los cambios que fueron impulsados por el pueblo boliviano en 2003 están siendo traicionados. En aquel momento muchos bolivianos creímos que Evo Morales era el encargado de dirigir ese proceso, pero hoy vemos que nos equivocamos porque la dirección del proceso de cambio solo está beneficiando a una nueva élite, una nueva burguesía y está frustrando el anhelo de todos.
A ocho años de gobierno, hoy vemos que muy poco ha cambiado, seguimos con las carencias de antes, con la incertidumbre a flor de piel y frustrados por la actual dirigencia gubernamental que ha terminado agotando el proceso social.
Esta nueva generación de jóvenes está demostrando que está dispuesta a tomar las calles por sus derechos; ya no es tiempo de pedir permiso, pedir respeto, pedir inclusión; hoy la juventud va a ejercer sus derechos. Este siglo llegó con grandes cambios, y los jóvenes somos protagonistas de estos procesos transformadores en países como México, Venezuela, Brasil y Chile, entre otros luchan por una mejor democracia.
En la juventud, Bolivia encontrará la transformación democrática. Creemos que las organizaciones y partidos políticos que no se atreven a apostar por sus jóvenes, que los consideran inexpertos, inmaduros e incapaces, están condenados a repetir los errores de la vieja partidocracia, están condenados a una visión electoralista y de corto plazo, están condenados a desaparecer con sus líderes y sus viejas dirigencias.
Creemos que las organizaciones y partidos políticos que no invierten en sus jóvenes no tienen ni tendrán futuro. Creemos que el tiempo de los jóvenes es ahora, no cuando las viejas dirigencias lo consideren oportuno, no nos conformamos con esperar, pues tenemos mucho que dar y no nos vamos a callar.
Creemos que el Movimiento Sin Miedo es el espacio para los jóvenes y es nuevamente la vanguardia en propuestas, en conceptos, en renovación propositiva. No es casual que el MSM sea el primer partido en contar con jóvenes en un 30% de representación real en todas las estructuras y candidaturas, y además el único partido político que les ofrecerá a los jóvenes un programa de gobierno específico para este sector, un programa que garantiza lo que más importa a los jóvenes: OPORTUNIDAD.
Por todo esto debemos avanzar sin espejo retrovisor, es decir sin mirar atrás, sin cometer los errores históricos del pasado. Las camarillas, el corporativismo, el servilismo, el llunkerío y el pasanaku deben quedar en el olvido total.
Los Jóvenes Sin Miedo hemos asumido este papel protagónico y queremos que los jóvenes de los 9 departamentos de Bolivia tomen conciencia de lo importante que es ser partícipes de la vida social de nuestro país. Ya no somos el mañana, somos el presente, es ahora que los jóvenes ejerceremos nuestros derechos, nuestras conquistas.
Por todo esto, vemos con profunda alegría contar con una persona líder como Adriana Gil quien desde joven ha sido una figura incómoda y contestataria para el poder, sea de la antigua como de la nueva derecha, alguien que venció la discriminación de la que somos víctimas los jóvenes, las mujeres, y que supo decir las verdades a todos.
Esta alegría se completa al consolidarse esta alternativa con el Movimiento Sin miedo, con Juan del Granado, quien siempre tuvo interés en resolver los problemas de la juventud. En La Paz somos testigos de la gran apuesta por la renovación ya que contamos con Luis Revilla, el mejor alcalde de Bolivia.
Con este acuerdo democrático, programático y progresista, queremos dar una señal a la población, de que estamos construyendo una verdadera alternativa para el país, de que existe otra opción, otro camino, no el camino de la derecha, ni el de los falsos izquierdistas que se disfrazaron de ovejas para engañar a la población…
Creemos que con la juventud, con renovación y con propuesta…. ¡Bolivia es Imparable!
La autora es dirigenta
nacional del MSM, y pronunció este discurso durante la proclamación del binomio electoral Juan Del Granado - Adriana Gil, el 1 de julio de 2014 en la ciudad de La Paz.