La anterior semana, el candidato a segundo senador del Movimiento Sin Miedo (MSM) por La Paz Antonio Vargas expuso las principales propuestas de su partido en debates y entrevistas en al menos tres medios de comunicación, y en todas sus intervenciones el oficialismo le respondió con argumentos poco sustentables y ataques personales. Ni el presidente y actual candidato
del MAS Evo Morales ni García
Linera quieren debatir en público con sus contrincantes.
Durante sus intervenciones, Antonio Vargas explicó con claridad conceptos, historia y coyuntura, y demostró con hechos, datos y cifras el aumento de la corrupción, la retardación de justicia y el crecimiento del narcotráfico en el gobierno de Evo Morales.
El debate más reñido fue con José “Gringo” Gonzáles, candidato a segundo senador por el Movimiento al Socialismo (MAS). El encuentro entre estos dos periodistas debía realizarse en el canal 36 Cadena A, pero fue suspendido porque Gonzáles no asistió a la cita. Sin embargo, el debate se concretó al fin en oficinas del diario cruceño El Deber, medio que reprodujo el contenido del mismo en una publicación.
El debate más reñido fue con José “Gringo” Gonzáles, candidato a segundo senador por el Movimiento al Socialismo (MAS). El encuentro entre estos dos periodistas debía realizarse en el canal 36 Cadena A, pero fue suspendido porque Gonzáles no asistió a la cita. Sin embargo, el debate se concretó al fin en oficinas del diario cruceño El Deber, medio que reprodujo el contenido del mismo en una publicación.
En el encuentro, ambos candidatos coincidieron en algunas temáticas, como la importancia del debate en coyuntura electoral, que no se debe elegir con quién debatir y sobre la frontera que debe existir entre el periodismo y la política.
Vargas y Gonzáles mostraron una fuerte discrepancia cuando tocaron temas referidos a la distribución de bonos y a la fiscalización de los recursos del Estado. El candidato del MSM dijo que la repartición de bonos no es igualitaria ni universal, y que sólo se otorgan a quienes gozan de una condición especial como las mujeres embarazadas, niños o ancianos. Además, dijo que los mismos no deben repartirse “eternamente” porque esta situación provocará que “la gente no produzca”.
Gonzales respondió que los bonos no serán eternos y que el año 2025, cuando la pobreza extrema se elimine al fin, porque así lo aseguró el actual Presidente Evo Morales, entonces “la gente ya sabrá cómo resolver su vida”.
Sin embargo, la pobreza no se elimina por decreto, retrucó Vargas e insistió en las dudas y susceptibilidades que crea el gobierno con un manejo aparentemente poco claro de los recursos del Estado provenientes de la explotación de hidrocarburos, que se invierten en cumbres innecesarias y en la compra de un satélite que no cumple con las expectativas.
“No hay nacionalización, sólo hay una revisión de contratos porque aún hay empresas extranjeras manejando partes sensibles de la producción de hidrocarburos… lo que hay ahora es sólo una revisión de contratos”, explicó Vargas.
Al respecto, el partido de gobierno en la voz de Gonzáles respondió que la población realizará el control social correspondiente sobre el manejo de la economía del país. No obstante, Vargas aseguró que la función de la gente no es fiscalizar y que ésta debe cumplirse a partir de los miembros de la Asamblea Legislativa, quienes fueron elegidos precisamente por la población.
Gonzáles sólo atinó a responder que las alusiones de Vargas eran despreciativas y groseras, pero no pudo explicar el sometimiento de entidades fiscalizadoras como la Contraloría General del Estado y el Ministerio Público, como afirmó el representante del MSM.
El estudio de Radio Compañera fue otro escenario de debate entre Ximena Costa de Unidad Demócrata (UD), Oscar Heredia del Partido Demócrata Cristiano (PDC) y Antonio Vargas del MSM. En la recta final del encuentro, la interrogante se centró en las propuestas y en cómo pensaba cada frente llevarlas a la práctica en beneficio del país.
Costa dijo que era necesario desarrollar una administración eficiente de los recursos del país y Heredia afirmó que lo principal era resolver la falta de empleo y la inseguridad ciudadana.
A su turno, Vargas expuso las cinco políticas de urgencia propuestas por el MSM. La primera tiene que ver con la construcción de 3.000 barrios y comunidades “de verdad”, es decir extender las obras beneficiosas de la Alcaldía paceña a otras comunidades y municipios del país.
Asimismo, el candidato del MSM dijo que se espera mejorar la seguridad ciudadana, eliminar la desnutrición y la pobreza, además de generar empleos para los jóvenes. Finalmente, detalló que el MSM propone crear dos fondos de inversión, uno relacionado con la producción de alimentos y materias primas, y el otro para reponer las reservas de hidrocarburos.
Por otro lado, en la emisora estatal Patria Nueva el candidato del MSM manifestó su preocupación por el crecimiento de los hechos ilícitos del narcotráfico y las obras que entrega el gobierno sin considerar la urgencia o prioridad de las mismas.
Vargas volvió a referirse a la compra irregular del satélite Tupac Katari, sobre todo a la cantidad de dinero que se invirtió en el artefacto, el cual no sirve para satisfacer las principales necesidades de monitoreo y telecomunicaciones.
Una de las interlocutoras que representa al oficialismo se limitó a cuestionar el recorrido profesional de Vargas. Gonzáles hizo referencia al “coche último modelo” de Vargas cuando éste se refirió a que debería existir una distribución igualitaria de los bonos.
En Patria Nueva, Vargas fue aludido por una supuesta falta de conocimiento de economía y su recorrido profesional en el periodismo. Éste se limitó a explicar los proyectos y estudios que realizó y pidió no ser atacado.
Con respuestas o no, lo cierto es que a través de sus representantes el MAS respondió en estas intervenciones con alusiones personales al representante del MSM y argumentos con poco contenido, y sin responder de forma directa a las interrogantes del frente opositor.
“Además de no saber debatir democráticamente, mostrando tolerancia y pluralismo con las ideas diferentes, los masistas tienen pánico escénico a debatir porque ponen en evidencia que no tienen respuestas para preguntas inquietantes relacionadas con el despilfarro, la corrupción, la mala gestión, el abuso del poder y otras cosas”, sostuvo más tarde Vargas en su cuenta de Facebook.
Los jefes del MAS no quieren o no pueden debatir
Hasta ahora, solo algunos candidatos del MAS asisten a debates públicos con representantes de la oposición. Ni el presidente y actual candidato del MAS Evo Morales ni su candidato a la vicepresidencia Álvaro García Linera quieren debatir en público con sus contrincantes.
Morales y Linera manifestaron públicamente que debatirán con las organizaciones sociales y comunidades, es decir durante los actos públicos de entrega de obras. “Cada día debatimos con las organizaciones sociales y con las comunidades. Estamos mostrando la verdad, no chismes ni denuncias falsas, sino la verdad”, alegó García Linera en una conferencia de prensa realizada la semana pasada.
Morales ratificó esta postura, reiteró que no debatirá con quienes apoyan el imperialismo y retó a los opositores a debatir entre ellos. “Los que representan a la derecha, al imperio norteamericano, al capitalismo, están pidiendo debatir con Evo, nosotros debatimos con el pueblo mediante sus fuerzas sociales. ¿Qué puedo debatir con representantes del imperio norteamericano, qué tengo que debatir con los representantes del imperialismo?, no tengo nada que debatir”, declaró Evo.
A este hecho se suma que el ex ministro de Gobierno Carlos Romero y ahora candidato a senador por el MAS perdió el control de sus emociones en un debate en la Universidad Gabriel René Moreno en Santa Cruz. Romero fue abucheado por estudiantes de la carrera de Ciencias Políticas cuando ofrecía detalles de las regalías que percibe el Estado por la explotación de hidrocarburos.
Al respecto, el candidato a segundo senador por el MSM Antonio Vargas comentó en su cuenta de Facebook que “es indignante que un candidato masista tenga permitido reaccionar como lo hizo Romero, cuando nosotros -la oposición- debemos soportar todo tipo de escarnio y contestar únicamente con la contundencia de los hechos de mal gobierno, corrupción, pésima gestión pública y gasto dispendioso, mientras Uds. señores y señoras del MAS tienen todo el aparato gubernamental para protegerlos cuando ‘pierden la calma’ frente a argumentos que no pueden rebatir”.
Vargas y Gonzáles mostraron una fuerte discrepancia cuando tocaron temas referidos a la distribución de bonos y a la fiscalización de los recursos del Estado. El candidato del MSM dijo que la repartición de bonos no es igualitaria ni universal, y que sólo se otorgan a quienes gozan de una condición especial como las mujeres embarazadas, niños o ancianos. Además, dijo que los mismos no deben repartirse “eternamente” porque esta situación provocará que “la gente no produzca”.
Gonzales respondió que los bonos no serán eternos y que el año 2025, cuando la pobreza extrema se elimine al fin, porque así lo aseguró el actual Presidente Evo Morales, entonces “la gente ya sabrá cómo resolver su vida”.
Sin embargo, la pobreza no se elimina por decreto, retrucó Vargas e insistió en las dudas y susceptibilidades que crea el gobierno con un manejo aparentemente poco claro de los recursos del Estado provenientes de la explotación de hidrocarburos, que se invierten en cumbres innecesarias y en la compra de un satélite que no cumple con las expectativas.
“No hay nacionalización, sólo hay una revisión de contratos porque aún hay empresas extranjeras manejando partes sensibles de la producción de hidrocarburos… lo que hay ahora es sólo una revisión de contratos”, explicó Vargas.
Al respecto, el partido de gobierno en la voz de Gonzáles respondió que la población realizará el control social correspondiente sobre el manejo de la economía del país. No obstante, Vargas aseguró que la función de la gente no es fiscalizar y que ésta debe cumplirse a partir de los miembros de la Asamblea Legislativa, quienes fueron elegidos precisamente por la población.
Gonzáles sólo atinó a responder que las alusiones de Vargas eran despreciativas y groseras, pero no pudo explicar el sometimiento de entidades fiscalizadoras como la Contraloría General del Estado y el Ministerio Público, como afirmó el representante del MSM.
El estudio de Radio Compañera fue otro escenario de debate entre Ximena Costa de Unidad Demócrata (UD), Oscar Heredia del Partido Demócrata Cristiano (PDC) y Antonio Vargas del MSM. En la recta final del encuentro, la interrogante se centró en las propuestas y en cómo pensaba cada frente llevarlas a la práctica en beneficio del país.
Costa dijo que era necesario desarrollar una administración eficiente de los recursos del país y Heredia afirmó que lo principal era resolver la falta de empleo y la inseguridad ciudadana.
A su turno, Vargas expuso las cinco políticas de urgencia propuestas por el MSM. La primera tiene que ver con la construcción de 3.000 barrios y comunidades “de verdad”, es decir extender las obras beneficiosas de la Alcaldía paceña a otras comunidades y municipios del país.
Asimismo, el candidato del MSM dijo que se espera mejorar la seguridad ciudadana, eliminar la desnutrición y la pobreza, además de generar empleos para los jóvenes. Finalmente, detalló que el MSM propone crear dos fondos de inversión, uno relacionado con la producción de alimentos y materias primas, y el otro para reponer las reservas de hidrocarburos.
Por otro lado, en la emisora estatal Patria Nueva el candidato del MSM manifestó su preocupación por el crecimiento de los hechos ilícitos del narcotráfico y las obras que entrega el gobierno sin considerar la urgencia o prioridad de las mismas.
Vargas volvió a referirse a la compra irregular del satélite Tupac Katari, sobre todo a la cantidad de dinero que se invirtió en el artefacto, el cual no sirve para satisfacer las principales necesidades de monitoreo y telecomunicaciones.
Una de las interlocutoras que representa al oficialismo se limitó a cuestionar el recorrido profesional de Vargas. Gonzáles hizo referencia al “coche último modelo” de Vargas cuando éste se refirió a que debería existir una distribución igualitaria de los bonos.
En Patria Nueva, Vargas fue aludido por una supuesta falta de conocimiento de economía y su recorrido profesional en el periodismo. Éste se limitó a explicar los proyectos y estudios que realizó y pidió no ser atacado.
Con respuestas o no, lo cierto es que a través de sus representantes el MAS respondió en estas intervenciones con alusiones personales al representante del MSM y argumentos con poco contenido, y sin responder de forma directa a las interrogantes del frente opositor.
“Además de no saber debatir democráticamente, mostrando tolerancia y pluralismo con las ideas diferentes, los masistas tienen pánico escénico a debatir porque ponen en evidencia que no tienen respuestas para preguntas inquietantes relacionadas con el despilfarro, la corrupción, la mala gestión, el abuso del poder y otras cosas”, sostuvo más tarde Vargas en su cuenta de Facebook.
Los jefes del MAS no quieren o no pueden debatir
Hasta ahora, solo algunos candidatos del MAS asisten a debates públicos con representantes de la oposición. Ni el presidente y actual candidato del MAS Evo Morales ni su candidato a la vicepresidencia Álvaro García Linera quieren debatir en público con sus contrincantes.
Morales y Linera manifestaron públicamente que debatirán con las organizaciones sociales y comunidades, es decir durante los actos públicos de entrega de obras. “Cada día debatimos con las organizaciones sociales y con las comunidades. Estamos mostrando la verdad, no chismes ni denuncias falsas, sino la verdad”, alegó García Linera en una conferencia de prensa realizada la semana pasada.
Morales ratificó esta postura, reiteró que no debatirá con quienes apoyan el imperialismo y retó a los opositores a debatir entre ellos. “Los que representan a la derecha, al imperio norteamericano, al capitalismo, están pidiendo debatir con Evo, nosotros debatimos con el pueblo mediante sus fuerzas sociales. ¿Qué puedo debatir con representantes del imperio norteamericano, qué tengo que debatir con los representantes del imperialismo?, no tengo nada que debatir”, declaró Evo.
A este hecho se suma que el ex ministro de Gobierno Carlos Romero y ahora candidato a senador por el MAS perdió el control de sus emociones en un debate en la Universidad Gabriel René Moreno en Santa Cruz. Romero fue abucheado por estudiantes de la carrera de Ciencias Políticas cuando ofrecía detalles de las regalías que percibe el Estado por la explotación de hidrocarburos.
Al respecto, el candidato a segundo senador por el MSM Antonio Vargas comentó en su cuenta de Facebook que “es indignante que un candidato masista tenga permitido reaccionar como lo hizo Romero, cuando nosotros -la oposición- debemos soportar todo tipo de escarnio y contestar únicamente con la contundencia de los hechos de mal gobierno, corrupción, pésima gestión pública y gasto dispendioso, mientras Uds. señores y señoras del MAS tienen todo el aparato gubernamental para protegerlos cuando ‘pierden la calma’ frente a argumentos que no pueden rebatir”.